Junín Pionero en Teleconferencias
En los años 80 autoridades y docentes de la Escuela Arboit de Junín, elevaron un proyecto de creación de la primera cátedra de Informática del Nivel Medio de la provincia.
La "prehistoria" de las teleconferencias en los 80 tuvo a Junín de protagonista
Hoy, en pandemia, muchas de las actividades se sostienen gracias a Internet. Desde la educación, pasando por el teletrabajo, las sesiones legislativas, las reuniones laborales y hasta las comunicaciones entre los gobiernos.
Pero esto, que ahora parece algo tan común, tuvo un inicio experimental y, si bien se lo mira, no fue hace tanto tiempo.
Y en esos inicios, al menos en el país, una escuela secundaria de Junín, en Mendoza, tuvo una participación importante.
Se trata de la Escuela 4-016 “Ing. Antonio Marcelo Arboit”, que fue parte de las primeras experiencias de “telemática”, como se llamó en los 80.
El doctor en Ingeniería Jesús Rubén Azor Montoya, ex-docente de la Escuela Arboit y profesor de la Universidad de Mendoza, recordó para Diario Uno como fue aquello.
“En estos tiempos de pandemia que nos toca vivir, la Educación a Distancia aparece como el elemento de salvataje para la enseñanza de nuestros alumnos. Este hecho me trae a la memoria un camino recorrido que, sin siquiera imaginarlo, desemboca hoy en esta técnica en pleno auge y desarrollo”, cuenta.
Dice que fue “acompañamiento temprano a la ciencia de la Telemática, que nos tocó vivir en nuestra Escuela 4-016 “Ing. Antonio Marcelo Arboit” de Junín, en la provincia de Mendoza”.
Azor recuerda que “corría el año 1980 cuando, a propuesta de las autoridades y docentes de la Arboit, se eleva el proyecto de creación de la primera cátedra de Informática del Nivel Medio de la provincia. El mismo es prontamente aprobado y puesto en marcha en ese ciclo lectivo”.
“Con el correr del tiempo se fueron incorporando dispositivos de distintas generaciones en un ámbito que crecía día a día dentro de lo que podríamos llamar hoy la “edad de piedra” de la Informática”.
Después vino el “Primer Encuentro Internacional de Maestros de I*EARN en la ciudad de Puerto Madryn (Chubut) y tuve la posibilidad de incorporarme a esa organización y a la Red Telar, que promovía la Telemática en la Argentina, apoyada por el Ministerio de Cultura y Educación de la Nación”.
La Red Telar poseía un BBS (Bulletin Board System) precursor de los servidores de Internet actuales, “que permitía muy pocas aplicaciones, pero que para ese tiempo eran maravillosas”, dice el ingeniero y explica que “las comunicaciones con este servidor se hacían a través de la telefonía fija, mediante la Red Arpac, el primer sistema nacional para la transmisión de datos. El Ministerio de Relaciones Exteriores brindaba un acceso a Internet cada 12 horas, lo que nos permitía el uso del correo electrónico para mensajes de texto y archivos adjuntos”.
Azor recuerda que “a posteriori del Encuentro de Madryn, en la Escuela Arboit un grupo de formadores de la Red Telar entrenó durante una semana a docentes de toda la provincia en las técnicas de comunicación telemática, mediante el uso del BBS” y sostiene que “fue de este modo que comenzó a crecer el interés y la predisposición de los docentes a valerse de estos avances tecnológicos en pos de una potenciación de la actividad educativa”.
Jesús Ruben Azor
El profesional juninense cuenta que “conforme a los lazos estrechados en este ámbito y la fortaleza del trabajo cooperativo a nivel internacional, la Red Telar consiguió en 1996 varios video-teléfonos que suministró una ONG de Estados Unidos, que comienzó la promoción de estas técnicas”.
Azor recuerda que “el equipamiento era muy burdo, a los ojos de hoy, un teléfono usual con un soporte que era una pantalla de TV básica de tubo de rayos catódicos en blanco y negro”.
Además indica que “cuando llegó a nuestra Escuela, inmediatamente promovimos la primer Teleconferencia con este dispositivo. Es así como, en un ámbito a medio construir y con piso de tierra (que hoy es parte del Laboratorio de Informática) se gestó la comunicación con la Escuela CPEM 3 de Zapala, Neuquén”.
Azor relata que ese día “con la presencia del director General de Escuelas de la provincia, profesor Domingo De Cara, y una audiencia expectante, se realizó el evento” y agrega que “en el otro lado de la línea se encontraba la directora del CPEM 3, profesora Adriana Vilela. Los diálogos se amplificaban con parlantes para que los presentes compartieran lo expresado y las imágenes viajaban de uno a otro extremo, ´congeladas`, Esto es, la cámara del video-teléfono “tomaba una fotografía” y la enviaba al otro extremo. El protocolo establecía que al ver la imagen distante, se aplaudía”.
Finalmente el ingeniero Jesús Rubén Azor Montoya dice que esa jornada “fue maravillosa, el entusiasmo cundió y a los años se transformó en la realidad que hoy nos toca vivir”.
Fuente: Diario UNO por Enrique Pfaab
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