22 Años de un Pulmón Verde en el Este

Está en Palmira y alberga 50 especies y es regado por efluentes que anteriormente producían olores nauseabundos, hoy cuenta con unos 100 mil eucaliptos

Es un bosque con 100.000 eucaliptos que se ubica en San Martín.

En Palmira, se ubica una plantación de 100.000 eucaliptos que se ha transformado en un verdadero pulmón verde para la zona Este. El bosque es regado por efluentes líquidos de una destilería de alcohol vínico a la que pertenecen esas 109 héctareas forestadas. El lugar posee una laguna y alberga a unas 50 especies, que son intensamente cuidadas de los cazadores furtivos.

Gustavo Flores es ingeniero agrónomo y uno de los responsables por el cuidado de este inmenso bosque que pertenece a Derivados Vínicos. Según explicó las primeras plantaciones se realizaron en 1996, pero los trabajos previos, casi dos años antes. “Trabajamos acondicionando el terreno ya que la zona donde está actualmente el bosque era una zona inculta o zona de monte”, dijo.

Anteriormente a decidir que el eucalipto iba a ser el cultivo a implantar, hubo ensayos que se realizaron junto con la Facultad de Ciencias Agrarias, "en laboratorio como en campo de distintas pasturas, cultivo de casuarinas, que es otro tipo de árbol, y obviamente eucaliptos", indico.

Así, en esa zona terminó reinando el eucalipto de la variedad camaldulensis. “Es una variedad perenne (tiene hojas todo el año),  muy tolerante con respecto a la salinidad -tanto del suelo como del agua de riego-, resistente a heladas y muy plástico con respecto al consumo de agua, es decir, puede soportar periodos de sequía, como también absorber mucha agua cuando tiene disponibilidad. De hecho en Australia, donde es originario, se utiliza para eliminar pantanos o zonas anegadas”, detalló el agrónomo.

En esas hectáreas  conviven 50 especies: hay jilgueros, palomas, caranchos, pájaros carpinteros, zorros, liebres y mulitas, entre otros. Además, en la laguna, que queda en su interior, habitan varias especies de patos y nutrias.

El bosque es regado por los efluentes líquidos que produce esa planta de San Martín: “El riego es a manto o por inundación, con algunas variantes, si se trata de árboles adultos o recién plantados. El efluente producido tiene una alta carga orgánica, este pasa por la planta tratadora, donde se realiza un tratamiento primario mediante decantadores centrífugos. Se separa el sólido y al líquido resultante, se le corrige la acidez con cal y la salinidad, mediante dilución. Cumpliendo con los parámetros exigidos, va hacia el bosque a regar más los árboles”, puntualizó Flores.

Este pulmón verde consume parte del CO2 que emite esa fábrica, y hace reutilizanción agrícola de su propio efluente, generando un valor agregado a la actividad. El trabajo que realizaron en esa zona del Este mendocino con la implantación de este bosque fue reconocido oficialmente, tanto es así, que hoy otras empresas adoptan este sistema de tratamiento.

“Actualmente estamos en un proceso de replantación. Desde mayo de 2016, hemos replantado alrededor de 18.000 plantines y tenemos pensado llegar a unos 35.000 entre 2018 y 2019. Con respecto a la ampliación estamos trabajando sobre algunos sectores que quedan sin cultivar, como por ejemplo, antiguas piletas de sedimentación”, finalizó el ingeniero agrónomo.

Fuente Diario El Sol